Reflexiones

PAPÁ Y MAMÁ...¿PUEDES AYUDARME?

Al iniciar con la lectura probablemente podrás cuestionarte del porqué el título que elegí, aparentemente no tiene que ver con el ámbito educativo; pero es un tema en el cual como yo, muchos docentes deberían prestar mayor atención dentro del aula de clases. Continúa leyendo por favor.

En nivel primaria (deseo suponer así en todo nivel) cuando se nos asigna un grado y grupo escolar, se empiezan a formar proyectos a largo plazo, los cuales, casi siempre tienen como meta elevar la calidad de educación en nuestros alumnos, y para iniciar esa larga travesía a tan anhelado final tenemos que empezar por lo más sencillo; las inscripciones y es ahí donde encontramos esos pequeños detalles como: "No pudo venir el papá, soy el tío", "No traje la documentación completa", "Mañana inscribo", y así cuestiones similares que por decirlo de alguna manera en esta primer impresión, podría parecernos normal por las prisas propias de la vida actual, pero es indispensable que desde este instante llevemos registro de las incidencias.

Un segundo momento es el cumplimiento de útiles escolares, otro tema donde definitivamente el niño o la niña no es responsable directo en su cumplimiento; y nuevamente salen esos pequeños detalles: "No pude adquirirlo", "Se nos olvidó", "Mañana lo envío", "Perdí la nota".  Para esta ocasión debemos ya trabajar con nuestros registros, de haberlo hecho desde el primer momento es conveniente verificar si hay padres de familia que recaen en los "olvidos".

¿Por qué es conveniente realizar el registro desde un primer acercamiento con los padres de familia? Porque nos permitirá visualizar a los alumnos que requerirán más nuestro apoyo como docentes, porque aunque no es una regla básica o segura, es muy probable que aquello padres que incurrieron en faltas tanto en inscripción como en cumplimiento de útiles, sean los mismos que no apoyen o revisen tareas escolares de su hijos; y es ahí donde nuestra gran meta final empieza a no lograrse. 

Para liberar obstáculos de esta índole es recomendable las pláticas con los padres de familia acerca de la importancia de su contribución a la educación de su hijo(a), ciertamente los tiempos laborales de los padres podrían dificultar algunas ocasiones la realización de algunas actividades, ahí es donde convienen formular acuerdos de fines de semana; donde se fortalezca la relación padre-alumno. Cada docente de acuerdo al contexto en que se encuentre adecuará las estrategias que más considere pertinentes.

Para finalizar entonces volvemos a la pregunta principal: papá y mamá ¿puedes ayudarme?, estimado compañero(a) deseo fervientemente que dentro de la respuesta que pudiera brindar el padre de familia se encuentre parte tu trabajo, dedicación, esmero, compromiso y amor hacia los seres que hacen posible la magia en el aula: nuestros alumnos.

Denisse Lugardo Escobar.